Un paseo por la obra de grandes artistas.

domingo, 31 de enero de 2016

JESÚS CURIÁ(1969) / EL JUEGO YA ES LO ÚNICO


  •  La escultura ya ha llegado a la dimensión de transmitir un hechizo que se transmuta en figurantes con su propio movimiento e historia, que indaga en la estructura de sus formas y las recrea en el aire o en el suelo, jugando, permeabilizándose, moviéndose, al punto de llegar a ser fuentes, en esta ocasión etnográficas, de la plástica.       


  •  La obra del español CURIÁ se distingue por esas características que incluso proporcionan una visión alegórica, expresiva y antropocéntrica de la existencia. Sus personajes están enfocados como una concepción existencial en otro contexto, que sin embargo no nos es ajeno y cuyos valores formales se ajustan a una vivacidad que se hace patente por sí misma. 


  •  Es en esa secuencia de idea y plasmación en la que el artista dispara su imaginario y en la  que las piezas acaban por alcanzar su realidad, esa opción visual y táctil que nos hace  percibir la cualidad y determinación de un conjunto llamado a la prueba legítima de su  revelación.    

La crisis sanitaria global desafía cualquier hipérbole (Mike Davis).